martes

ESPACIO Y TIEMPO EN LAS PATOLOGÍAS MENTALES (45) - HÉCTOR GARBARINO

 1ra edición: Editorial Roca Viva / Julio 1996

1º edición WEB: elMontevideano Laboratorio de Artes / 2019


V. MELANCOLÍA

DISCUSIÓN (2)


Héctor Garbarino: “El enfoque que usted hace yo lo comparto en cuanto a que el conflicto entre el Yo y el superyo evidentemente debe de existir aunque, me parece a mí, que es insuficiente para explicar el material clínico de la paciente.


Estoy de acuerdo que todos estos hijos muertos indudablemente tienen que ver con el objeto perdido del que haba Freud y cómo este objeto perdido vacía al Yo, decía Freud, produce una hemorragia en el Yo; entiendo que el dolor del melancólico no excluye esta situación señalada por Freud, que este dolor del melancólico se debe en buena parte a la hemorragia que se opera en el Yo, lo que Freud llamaba el vaciamiento del Yo a consecuencia del objeto perdido. Pero a mí me parece que en esta paciente quedarían sin explicar muchas cosas si nos atenemos exclusivamente a este conflicto.


Creo que cuando se apunta al conflicto que más verdaderamente opera en la psicosis de la paciente, más importante que el conflicto entre el Yo y el superyo, es el conflicto entre las distintas dimensiones espaciales o lo que es lo mismo, entre el narcisismo del Yo y el narcisismo del Ser, o entre el tiempo diacrónico y el tiempo instantáneo, sincrónico; me parece que esta lucha entre el Yo y el superyo no da cuenta de estos conflictos. ¿Cómo se explica que la paciente diga que estamos en el momento de su nacimiento? ¿Cómo explicamos que esta paciente tenga esa visión de las cruces en todas partes, o que tenga esta visión del amarillo? Yo creo que el conflicto Yo-superyo no lo puede explicar. El conflicto Yo-superyo lo que explica es el ataque, como decía Freud del superyo, puro cultivo de la pulsión de muerte, atacando al Yo por la relación ambivalente con los objetos perdidos. Entonces me parece que al hablar de la coexistencia de distintos espacios se habla de otro conflicto; porque la paciente tiene por un lado la visión tridimensional que conserva y ve las personas como yo lo estoy viendo a ustedes. Pero la paciente agrega: “Yo les veo a todos ustedes cruces por todos lados, en los botones, en la ropa, en los ojos”. Me parece que las primeras son percepciones del Yo instancia, pero las otras no, las cruces no. Aquí podría plantear dos posibilidades: o son símbolos cósmicos que la pacienta percibe a expensas de su yo-Ser o son también representaciones que a consecuencia de lo que decimos nosotros, de que hay un aplanamiento del Yo, al aplanarse el Yo y hacerse bidimensional se vuelven presentaciones.


La multiplicación de cruces es la representación de hijos muertos, probablemente sí, tiene que ver con su dolor sobre esta situación, pero a su vez me parece que hay un conflicto en el modo en que se presenta la visión de su paciente; si yo los veo a ustedes y de repente también veo cruces estoy en una situación de conflicto; una situación de conflicto que me lleva a expresar la sensación de angustia que me produce el ver cruces por todos lados.


En cuanto al dolor del melancólico, una cosa que me ha interesado es que los psiquiatras que tienen experiencias con los trastornos de los melancólicos suelen decir que no hay mayor dolor que el dolor del melancólico. Y a mí me parece que este terrible dolor del melancólico es en parte debido al superyo atacando al yo, como decía Freud, pero a su vez que esto no es suficiente; me parece que ese dolor, esa angustia que lleva muchas veces al suicidio, esta pérdida de vitalidad del enfermo y la angustia que tiene es debido a que esa hemorragia del Yo produce un agujero, justamente no en el Yo instancia, sino en la trama bidimensional del yo-Ser. El agujero allí en esa trama es lo que produce el dolor insoportable, el dolor que lleva al sujeto a preferir la muerte, lo cual no sólo se explica por la culpa producida por el objeto perdido sino también por esta otra situación de dolor tremendo, que sería un dolor que ya no es psíquico solamente, es psicosomático. Es allí donde el cuerpo y el psiquismo se unen.


Esto lo decía también muy bien otro psicótico, Antonin Artaud, que el dolor arraiga en las profundidades, que el dolor psicótico está allí donde el cuerpo y el psiquismo se unen. Y allí donde el cuerpo y el psiquismo se unen hay un vacío, y eso es lo que produce el dolor insoportable. Entonces, me parece que la falla del Yo instancia llevaría a otros problemas, pero no a este tremendo problema del que estamos hablando, por ejemplo, de este agujero. Además, la falla del Yo instancia no explicaría el delirio tal como lo explicamos nosotros. El delirio de la paciente después recubre este agujero, proyecta, se vuelve perseguida y la situación mejora.


Pero yo quería referirme ahora a la pregunta acercad de si el yo-Ser tiene que ver con las identificaciones primarias. Freud habló de un Yo inicialmente bidimensional, el Yo es primero y ante todo una superficie. Esta bidimensionalidad se crea en relación con la madre, inicialmente es lo primero que aparece, como decía Freud, el Yo es ante todo un Yo corporal.


Nosotros entendemos que se nace como ser cósmico, entonces la instancia del Yo es fruto del vínculo con la madre, pero que en un principio no es más que Yo corporal, hasta que después se produce el Yo instancia con el desarrollo; las identificaciones primarias se van sucediendo hasta que junto a las identificaciones secundarias van a dar origen al Yo instancia; primero las identificaciones primerias y después las secundarias.


Pero del Yo corporal sería eso que decía Freud, que inicialmente no es más que un Yo corporal, quiere decir que hay un cuerpo que tiene sensaciones y reacciones ante ellas, pero todavía hay una identidad; no hay un sí mismo, no hay representaciones de sí. Y como nosotros creemos que en ese momento el cuerpo está abierto hablamos del yo-Ser, porque el yo corporal freudiano tiene un límite que es el límite corporal; le asignamos un límite abierto y le llamamos yo-Ser”.


No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
Google+