I
una mujer con piedras en los ojos
vino a gritar su hijo en mi cara
como si hubiera soplado desgracia en su vientre
y era nuestra miseria
II
Las manos se han vuelto pan
como si el mundo salara fatiga
Cuando los ojos de mis hijos jugaron a callarse
con sus platos repletos
ya no tuve sol
III / UNA CANCIÓN
Esa noche en cerveza y su escote
me bañé como naufrago obseso
puse trampas para cazar luces
de su corazón
En un pub de la new Ciudad Vieja
me embriagó en cicatrices sin alma
yo adorné mis consejos de amante
sin capa ni flor
La ceniza besó aquellos pechos
bajo el roto carnal de mis ojos
me invitó a respirar las estrellas
sin humo ni alcohol
Aquí que no hay luz
yo pensé saboreando sus pasos
y en mi boca hizo arena sus labios
besé un corazón
Nuestra noche manchaba tu infancia
mis triunfos del water amabas
y tu espina sanaba esta sabia
ardiéndome en dos
Quemé mi colchón
por el fraude de amante perfecto
sólo quise lustrar ese infierno
que esconde tu voz
Ya no busco el don
de la flor escondida en tus piernas
ni el calor de tus labios que llegan
tatuados de horror
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