III / Esquizofrenia
Espacio
y tiempo en la esquizofrenia (2)
(A
propósito de paciente)
¿Es que el exterior llama?
¿No es el exterior una
intimidad antigua
perdida en las sombras de la memoria?
Gastón
Bachelard, “La poética del espacio”
B)
El mito del andrógino
Si el mito del “árbol de
la vida” le sirve a este paciente para ilustrar simbólicamente su existencia
amenazada por el no Ser, con el mito del andrógino intenta recuperar la unidad
perdida para evitar la caída en el no Ser.
Dice el paciente: “Yo en
usted puedo confiar, pero en mi casa hombres que son mujeres y mujeres que son
hombres… Yo en parte no soy hombre”.
Y en otro momento: “¿Qué
opina de un cuerpo de mujer y cabeza de hombre? Siento los brazos y las piernas
más cortos. Uno está al revés en el sentido corporal. (10) El hombre es varón y
nena… Por algo que pasó de chico, sentí de una manera que mi cuerpo no acompañó.
(11)
“Hay muchos laberintos en
el hemisferio cerebral… unión, desunión… las ideas dan vueltas y vueltas y se
van para el otro lado. Confusiones”.
Las conexiones existentes
entre los sistemas del aparato psíquico y dentro de cada sistema entre sus
partes constituyentes, ya muy debilitada por la defectuosa constitución del
aparato, se pierden aun más al perder el aparato sus límites y abrirse al
cosmos, sembrando la confusión en el paciente al exponerlo a la desunión y el
caos.
El mito del andrógino le
permite no sólo expresar su anhelo de completud narcisista restableciendo la
unidad mítica original de los sexos, sino también encontrar un nuevo orden que
lo ponga a cubierto de la confusión y la amenaza del vacío de Ser.
Con el No Tiempo del mito
elude el tiempo diacrónico del yo que lo conduce al desorden y la confusión: “Otras
personas tienen parte de mí, ancestros y descendientes. Uno es y no es uno”. En
el tiempo sincrónico del mito recupera la unidad perdida.
Notas
(10) Otra significación
de “estar al revés”.
(11) Para M. Eliade (*)
el mito del andrógino es expresión de “la coexistencia de los contrarios, de
los principios cosmológicos (macho y hembra) en el seno de la divinidad”.
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