LAS CARTAS DE MOZART COMO ESPEJO DE SU POSICIÓN FRENTE AL MUNDO (2)
EL JUSTO MEDIO (10)
Muy extensamente trata
con su padre los pormenores de “El rapto del serrallo”. Tomamos de las cartas
las partes que constituyen una clave para la interpretación de la obra musical
de Mozart:
El “Drum Barte des
Propheten” está en el mismo tiempo, pero con notas más rápidas y como su ira
sigue creciendo hay que poner el allegro assai en otra compañía y en otro tono,
pues si no se podría creer que el aria ha terminado; esto causará el mejor
efecto. Pues una persona que se encuentra poseída por tan violenta ira trasgrede
todo ordenamiento, medida y fin no se conoce -del mismo modo no debe de
conocerse en la música-. Pero como la pasión, violenta o no, no debe ser expresada
hasta causar repugnancia y la música, aun en la situación más terrible, no debe
nunca ofender el oído, sino causarle placer y por lo tanto seguir siendo siempre
música, no he elegido ningún tono extraño al de fa (tono del aria), sino uno afín,
pero no el siguiente re, sino el otro, la menor (1).
Mozart no destruye,
revolucionario, los principios estéticos de su época, más bien los realiza
completamente. Sus sucesores se encargarán de hacerlo arbitrariamente.
Con el rudo realismo que
muestra de vez en cuando en presencia de amigos de confianza exhorta a una
cantante empalagosa:
…mando decir
especialmente a Gretl que al cantar no haga como la cola del zorro; pues el exceso
de dulce no es siempre agradable. Sólo a los burros tontos se los puede engañar
con esas cosas. Yo por mi parte prefiero a un rústico que no teme cagar y
pedorrear en mi presencia que dejarme embaucar por semejantes poses, tan
exageradas que se las puede agarrar con la mano. (2)
Con esto ha enjuiciado la
transgresión de un límite de moderación.
Pero él reclama aun más;
no sólo desprecia los extremos, sino que, además, exige que parezca natural.
…toca difícil, pero no se
nota que es difícil, uno cree que en seguida podrá imitarlo. Y eso es lo
cierto. Tiene también un sonido muy redondo, no se pierde ninguna nota, se oye
todo. Todo está marcado. Tiene un lindo staccato tanto en escala ascendente
como descendente. Y el trino doble, nunca lo he oído como el suyo. (3)
Notas
(1) A su padre, Viena,
26-IX-1781, II, 128.
(2) A su padre, Linz,
31-X-1783, II, 213.
(3) A su padre, Viena,
28-XII-1787, II, 189.
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