domingo

EL ALMA DE ALFREDO



Hugo Giovanetti Viola / Guillermo Wood

Un texto para teatro publicado en el volumen colectivo Aunque se llene de sillas la verdad (Taller Literario Universo / Ediciones Caracol al Galope / 2004).


PRIMER  CUADRANTE

(La acción transcurre en dos niveles espaciales: una base escénica donde hay una mesa y un escenario más alto. Luz tenue. Alfredo sentado en la mesa, de espaldas al escenario. Quimono negro y ojotas, despeinado, tomando mate y fumando. Una botella de whisky, dos vasos, tres ceniceros y tres cajas de cigarrillos. En una punta del escenario Guitarra Negra alisa un traje oscuro, una camisa y una corbata negra que cuelgan de un perchero. Está pintarrajeada y vestida de negro, con detalles plateados. Guitarra Blanca está en el otro rincón, en posición fetal y vestida con una especie de camisón entulado, tableado y volador. En el escenario hay un espejo y un cajón lleno de tomates, uno de ellos pinchado con agujas enhebradas. En el fondo hay una cama destendida, con una guitarra encima y unos zapatos debajo. Desde el principio, viene sonando Barrio Sur.)

Gorrión que arrulla un sueño / tarde que cae sobre los gatos / humilde luz de altillo / viejo Barrio Sur / crepúsculo de vino / patios gastados y dolor / tenés olor a mío Barrio Sur. / Sitio de mí que nadie ocupa / malvón que brota en un zaguán / nací de nuevo en cada niño tuyo Barrio Sur. / Angostos recovecos / rostro pintado en una luna azul / caminan murgas para siempre amándote y redoblan para vos. / Barrio del cementerio / perros perdidos y silencio / por tus faroles amarillos pasan murgas recordándome tu amor / tus niños y tus muertos / tus tristes yacumenzas / noche a noche mi propio corazón.

Alfredo (como mirando por una ventana): hay un viento que viene del sur / dónde irá

Guitarra Negra (bajando del escenario y olfateando): Resaca.

Alfredomadre

Negra: Madre tu madrina

Alfredopor los médanos blancos / sin decir nada / se fue mi padre

Negra: Pa. El atardecer te puso blandito. Ya se viene otra noche con gusto a cenicero (escupe).

Alfredodice mi padre que el sol brillará sobre el pueblo que sueña

Guitarra Blanca (canta): por favor no te sigas muriendo

Alfredoes la muer / es la muerte que ya vendrá / galopan / galopando en la oscuridad / por el mar / por el mar aparecerá / ya soy vie / ya soy viejo y sé que vendrá

Negra (señalando a Blanca): Che, y esta guacha está muerta. ¿No?

(Alfredo sube al escenario y Blanca le agarra una mano y se la pone sobre su vientre.)

Blanca (canta): duerme / duerme negrito

Alfredocon quién soñarás / con quién estás hablando / tal vez con tu Dios / si me estás escuchando / decile que estabas jugando con mi corazón (y agarra el tomate agujado).

Negra: Flaco, dejá a esa mina que está muerta y venite a bailar con mami.

Alfredo (deja el tomate, baja y se sirve un whisky): Vos ándate un poquito a la mierda.

Negra: ¿Y si no estoy yo quién te creés que te va a sacar a cantar mañana?

(Riff de El violín de Becho): Porque a becho le duelen violines / que son como su amor chiquilines / Becho quiere un violín que sea hombre / que al dolor y al amor no los nombre. / Vida y muerte violín padre y madre / canta el violín y Becho es el aire / ya no puede tocar en la orquesta porque amar y cantar eso cuesta.

(Durante la canción Alfredo sube al escenario con el vaso y se acerca al cajón. Blanca gatea hacia el cajón, agarra el tomate pinchado y le empieza a clavar agujas enhebradas. Alfredo se agacha, prende un cigarrillo y cierra los ojos como llorando. Ella le acaricia la cara, reconociéndosela como si fuese ciega.)

Negra: Ya empezaste a moquear. Terminala con ese tomate podrido.

(Alfredo baja, se sienta y sigue tomando. La Negra se sirve whisky y pasea mirando al público.)

Negra: Ustedes están con miedo como aquél, ¿no? (señala a la gente) Vos, vos, vos y vos (se acerca a Alfredo y sacude la mesa) ¿No te acordás que tenés un pueblo en la garganta, carajo?


SEGUNDO CUADRANTE

Alfredo: Yo sigo viviendo en la desembocadura del Santa Lucía: un chiquilín con muñones que en las mareas huérfanas de luna saltaba afuera del agua para morder pedazos de cielo que tenía que bajar al barro.

Negra: Pa, qué pedito qué tenés. Una lisa borracha.

Alfredo: Y a veces veía a las garzas del manantial que me invitaban a quedarme, pero yo tenía que bajar el cielo al barro.

Blanca (canta): el loco Antonio lo amaba más / remos de pala y chalana / las bajantes lo encontraban / pensando y dele fumar

Alfredo: Ese camarada amaba al río como a una mujer.

Negra: Y por tu casa cómo andamos con tanto amor herido.

Blanca (canta): hoy que el tiempo pasó te siento alrededor / amarte fue mejor que guardarte rencor

Alfredo: El Hombre Nuevo tendría que poder vivir como aquellas garzas.

Negra (carcajeando): Pa, otra vez con el Hombre Nuevo. Te ponés pesado. Pero si sos una cascarria: mucho hombrecito nuevo pero hoy llamaste pa cancelar la actuación.

Alfredo: Hoy no puedo.

Negra (desesperándose): ¿Te jubilaste? ¿Cuándo vas a volver a cantar, obrero? Tres lucas de las verdes, flaco. ¿Qué vamos a comer mañana? ¿Qué vamos a hacer mañana?

Alfredo (parándose para subir): el futuro sangra y masca el freno como una gran bestia echada pero inmortal

Blanca (canta mientras Alfredo sube y va hacia el perchero): vuelve a amar y no se cansa / la vida no le alcanza / la muerte es una ingenua adivinanza / flor azul en una lata / relámpago de plata / la vida no lo hiere ni lo mata


TERCER  CUADRANTE

(Suena Crece desde el pie mientras ellas lo ayudan a vestirse.)

Crece desde el pie musiquita crece desde el pie / uno dos y tres derechita crece desde el pie / crece la pared por hiladas crece la pared / crece desde el pie amurallada crece desde el pie / crece desde el pie la fogata crece desde el pie / crecen los mejores amores crecen desde el pie / crece desde el pueblo el futuro crece desde el pie / ánima del rumbo seguro crece desde el pie / cantan desde el pie los cantores cantan desde el pie / un poco de fe y los tambores pueden florecer / crece desde el pie la mañana crece desde el pie / el sonido de la campana crece desde el pie / crece desde el pie la semana crece desde el pie / no hay revoluciones tempranas crecen desde el pie / no olvides que el día y la hora crecen desde el pie / después de la noche la aurora crece desde el pie

(Al terminar la canción Alfredo le acaricia la cara a Blanca mientras ella le hace la corbata. Después lo peina con gomina frente al espejo y él se agacha y le acaricia el vientre.)

Alfredo: Aquí está mi tesoro.

Negra (pasando la mano entre Blanca y Alfredo para señalar el espejo): Mirate en esa foto allá en La claraboya amarilla. La pinta que tenías en aquellos tiempos: el zorzal de Punta del Este, flaca (dirigiéndose a Blanca) Soltá ese hueso que el próximo candombe es mío. Ese hueso y ese tomate, que con los tomates de abajo se llena el cajón entero (agarra del brazo a Alfredo y se lo lleva para abajo y lo aprieta contra su cuerpo mientras arranca Doña Soledad y Blanca se vuelve a fetalizar en el medio del escenario):

Mire Doña Soledad / póngase un poco a pensar / Doña Soledad / cuántas personas habrá que la conozcan de verdad / yo la vi en el almacén peleando por un vintén / y otros dicen haga el bien hágalo sin mirar a quién. / Cuántos vintenes tendrá sin la generosidad / Doña Soledad / con los que pueda comprar el pan y el vino nada más / la carne y la sangre son de propiedad de patrón / Doña Soledad / cuando Cristo dijo no usted sabe bien lo que pasó.

(Alfredo la empuja enojado mientras Blanca se levanta como un símbolo de liberación y discriminación de la animalidad.)

Negra: ¿Pero qué hacés? ¿Querés que me vaya a la mierda? ¿Quién te va a sacar a cantar mañana si no estoy yo?

Alfredo (va hacia la mesa y antes de sentarse la mira): solos y juntos


CUARTO  CUADRANTE

Alfredo (se vuelve a sentar): Pobre Silvio.

Negra: ¿Pero de qué estás hablando? Empezaste a delirar.

Alfredo (recita): Me he dado cuenta de que miento / siempre he mentido siempre he mentido / he dicho tanta inútil cosa sin descubrirme sin dar conmigo. / No amar en seco con tanto dolor / es quizás la única verdad que queda en mi interior bajo mi corazón / no sé si fue que malgasté mi fe en amores sin porvenir que no me queda ya ni un grano de sentir (se levanta, sube el tono y señala al público) yo sé que a nadie le interesa lo de otra gente con sus tristezas / esta canción es más que una canción / y un pretexto para sufrir y más que mi vivir y más que mi sentir / esta canción es la necesidad de agarrarme a la tierra al fin / de que te veas en mí de que me vea en ti (Blanca se reincorpora recomponiendo la verticalidad y Alfredo vuelve a sentarse y baja el tono) Yo sé que hay gente que me quiere / yo sé que hay gente que no me quiere.

Negra (burlándose): Amén. Esto es el hombre. Pobrecito.

(Alfredo sube al escenario cargando la silla en la espalda y se sienta frente a Blanca -que sigue parada en el centro- mientras empieza a sonar Explicación de mi amor. Apagón total.)

De golpe no estás nada más sucedió / borrachera fetal que tu muerte me deja / con esta canción que solloza olvidada de mí rondaré tus maderas. / Quisiera explicarte mi amor no tu ausencia o mis culpas ayer tú vivías / si ya no merezco cantar para ti yo te pido no sigas muriendo. / El tiempo pasado ese suave festín / donde fuiste una caja escondida un clavel encerrado en el muro / una oreja en la sombra el sigilo de nadie. / Ese tiempo y tú lo que yo conocí / lo que quisiste ser clavicordio y alcohol / sensitivo y brutal el pasado y el piano acabaron en este silencio. / Si ya no merezco cantar para ti yo quisiera explicarte mi amor aunque es tarde / tu tiempo pasó pero yo me quedé aquí tañendo por ti en tus campanas. / Cuerno de pastor de un remoto país / piedra lisa que el alba y el cielo tocaron / soy como tu mar rodaré eternamente hacia ti y desde ti a lo más hondo. / Mas mientras te busqué en las cosas / en tanto regreses sin que yo te llame o te olvide / te pido que limpies mi amargo dolor / por favor que no sigas muriendo. / Mi padre serás como fuiste mi padre / un gameto en la grieta cerrada del tiempo / voz ronca de un órgano ya enmudecido ahí estás larga caja de pino. / El llanto que nombre tu nombre será breve y hombre tal vez lo sabías / pero es tanto amor exigiendo mi amor / por favor no te sigas muriendo.

(Luz.)

Negra (sube al escenario, agarra a Alfredo y lo levanta): Levantemos el tomate, hermanito (lo lleva al espejo mientras Blanca se va hacia la otra punta) Bueno, bueno, mañana vas a tener que salir a cantar así que no jodas más y afeitate. ¿Qué te vas a afeitar? ¿La cara o la muñeca?

Alfredoya soy vie / ya soy viejo y sé que vendrá / pero siento que hago falta / falta mi cara en la gráfica del pueblo / mis ojos en la contemplación del mañana / siento que hago falta Que voy a seguir haciendo falta.

(Alfredo agarra la guitarra y se sienta en la silla que está en el medio del escenario. Ausculta la guitarra.)

Alfredo (con luz cenital): hay un viento que viene del mar / dónde irá / el aliento del viento parece que crece y calienta / amanece / y de andar cantando y en el dolor aprendemos a morir / de soledad y rabia / o de algún violento amor / de amor sin duda.

(Luz tenue. Se oye La canción y el poema.)

Hoy que el tiempo ya pasó / hoy que ya pasó la vida / hoy que me río si pienso / hoy que olvidé aquellos días / no sé por qué me despierto / algunas noches vacías / oyendo una voz que canta / y que tal vez es la mía. / Quisiera morir ahora de amor / para que supieras / cómo y cuánto te quería. / Quisiera morir quisiera de amor para que supieras. / Algunas noches de paz / si es que las hay todavía / pasando como sin mí / por esas calles vacías / entre la sombra acechante / y un triste olor de glicinas / escucho una voz que canta / y que tal vez es la mía. / Quisiera morir ahora de amor / para que supieras / cómo y cuánto te quería. / Quisiera morir quisiera de amor / para que supieras.

(Casi terminando la canción, las Guitarras se encuentran atrás de Alfredo y se abrazan. Cuando termina la canción, luz cenital sobre Alfredo.)

Alfredo: Les agradezco por este viaje. Como soy parte de la humanidad estoy de parte de la humanidad, estoy de parte de la vida. Y por eso voy a morir ahora (y se para) de amor para que sepan cómo y cuánto los quiero todos (apagón).

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
Google+