martes

ENCUENTRO CON LA SOMBRA (El poder del lado oscuro de la naturaleza humana)

VIGESIMONOVENA ENTREGA


6. EL DESCUBRIMIENTO DE LA SOMBRA EN LA VIDA COTIDIANA (2)


William A. Miller


Analizar nuestros sueños, ensueños y fantasías

El estudio de los sueños, ensueños y fantasías nos proporciona un último camino para tomar contacto con nuestra sombra personal. Aunque digamos lo contrario todos nosotros soñamos, ensoñamos y fantaseamos y si prestamos atención a estas actividades podremos aprender muchas cosas sobre nuestra sombra y sobre sus contenidos.

Cuando la sombra aparece en nuestros sueños asume el aspecto de una figura de nuestro mismo sexo. En el sueño reaccionamos ante ella con miedo, desagrado o disgusto, igual que lo haríamos ante alguien a quien consideramos inferior. En los sueños huimos de la sombra, la evitamos y frecuentemente experimentamos que nos persigue. La sombra también puede aparecer como una figura difusa a la que tememos y de la que intuitivamente escapamos. Nuestra tendencia habitual ante la sombra consiste en evitarla del mismo modo que solemos hacerlo en la vida consciente.

Pero esta figura es nuestra propia sombra -o un aspecto significativo de ella- por consiguiente, la actitud más adecuada será la de afrontarla y descubrir qué es y qué pretende. Debemos observar sus acciones, sus actitudes y sus palabras (en el caso de que pronuncie alguna). La sombra, a fin de cuentas, encarna dimensiones de nuestro ser que podrían ser conscientes y, por tanto, constituye un yacimiento muy provechoso para nuestro autoconocimiento.

Quizás insistamos en nuestra negativa a aceptar el hecho de que ensoñamos y fantaseamos pero lo cierto es que resulta imposible que la mente se mantenga atenta y concentrada durante toda nuestra vigilia. Por consiguiente: ¿qué pensamos cuando no estamos pensando en nada? ¿dónde va nuestra mente? ¿qué imágenes o fantasías pueblan nuestro pensamiento? Nuestros ensueños y nuestras fantasías pueden ser tan extrañas y contrarias a nosotros que hasta pueden resultar aterradoras. No se trata de algo que estemos dispuestos a admitir fácilmente ante los demás y en muchas ocasiones, ni siquiera las aceptamos ante nosotros mismos.

Pero negar su existencia es perder otra oportunidad de conocernos a nosotros mismos. En nuestras fantasías y en nuestros ensueños cotidianos podemos descubrir pensamientos, proyectos, deseos y sueños que somos incapaces de aceptar a un nivel consciente. Suelen ser fantasías de violencia, poder, riqueza y sexo. Son ensueños de abundancia en lo que conseguimos lo imposible. Una vez más, la sombra se halla dispuesta a compartir su patrimonio si la aceptamos y reflexionamos sobre ella.

Concluiremos diciendo que nadie puede tomar por nosotros la decisión de afrontar el mundo de nuestra sombra personal. Por otra parte, cada uno de nosotros tiene una vía de acceso diferente y debe seguir su propio camino. Pero aunque no existe un procedimiento universal para emprender este viaje al mundo de la sombra, las recomendaciones que hemos presentado en este capítulo pueden ser de mucha utilidad.


*  *  *


EL OTRO

¿Por qué mencionar los nombres
de dioses o estrellas,
espuma de un océano oculto,
polen de un jardín recóndito,
cuando lo que nos duele es la vida misma,
cuando cada nuevo día
desgarra nuestras entrañas,
cuando al caer la noche
nos retorcemos destrozados?
¿Cuándo sentimos el dolor de otro,
alguien a quien desconocemos
pero que siempre está presente,
y es la víctima, el enemigo, el amor
y todo lo que necesitamos
para llegar a ser completos?
Nunca alces tus súplicas a lo oscuro,
no apures la copa de la alegría de un solo trago.
Mira tu alrededor:
hay alguien, siempre hay alguien,
que respira tu sofoco,
se alimenta de tu hambre
y, al morir, convive
con la mitad más pura de tu muerte.

ROSARIO CASTELLANOS

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
Google+