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primera edición 2007: Caracol al Galope / elMontevideano Laboratorio de Artes
TRIGESIMOSÉPTIMA ENTREGA
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Isabelino Pena corrigió:
-Uruguayo.
Y me siento al lado del banco de carpintero y trato de desconcertarlo y sobrarlo al mismo tiempo:
-Soldado de la Purificación y de la cohorte celeste de Maracaná. ¿Qué más necesitás además de matarme?
El hombre purulento observó el resplandor del Rabuní taraceado por Almá y se rascó el bulto del saq:
-Te reíste demasiado.
-De qué.
-No sigas escupiéndome.
-Jesús nunca se rio de los amigos. Ni escupió a nadie.
Entonces la fluorescencia se le vuelve un doble taladro que solamente el Hombre Nuevo es capaz de aguantar y rezo un Padrenuestro con las manos abiertas.
-¿Cómo diablo puede saber un uruguayo sucio que alguien resucitó después de dos mil años?
-Sucia tenés la fe. Porque seguís jugando al Viva la Nada como una burra si ojos pero no podés dejar de creer. Y por eso mataste a Esteban el Valiente.
Y eso lo hace decidirse a perforarme con el relámpago del sicar y gruñir:
-Necesito el mosaico.
SARA 19: El campo lo compraron cuando terminó el reposo legal del shabbath 16 de Nisán y esa noche el Iscariote vino solo a tu casa y te pidió que lo escondieras en la sheol y ni siquiera preguntaste por Esteban y al rato Judas explicó que los dos se habían vuelto ángeles malignos pero que el Valiente era más peligroso que los fariseos y los zelotas juntos porque no creía en Dios ni en Satanás y lo único que le importaba era llegar a ser un Herodes el Grande o un Tiberio Claudio Nerón Julio César y no se daba cuenta que los asesores nunca son respetados como héroes por los propios héroes que asesoran y que acababa de despanzurrarlo y tirarlo al barranco envuelto en la talita patas que los discípulos lo confundieran con él y que si Almá lo denunciaba iba a terminar igual y dijiste Y yo qué: Vos sos mía sonrió Judas Y sabés que Jesus no es más que el Hijo el que invento esta Gehena para jugar con sus esclavos eternos y nunca va a pedirnos perdón por no saber lo que hacía y gritaste Pero si Jesús puede resucitar es porque podemos dejar de odiar a Dios y el Iscariote abrió un botijo y entendiste que lo único que esperaba era ser condenado por el maestro y terminó vaciándose la copa en la pelada idéntica a la de Esteban y mientras se rebañaba el goterío con una lengua-látigo confesó Yo siempre fui la novia más enamorada pero él no se dio cuenta y terminó jugando a ser el pastor de los desesperados y los miedosos del siglo como si se pudiera: y esa noche le contaste todo a Almá y ella te contestó cantando: Con la alabanza de los pequeños y de los niñitos de pecho has construido una fortaleza por causa de tus enemigos para acabar con rebeldes y adversarios.
Isabelino Pena advirtió:
-Eso sobre mi cadáver.
-Como quieras.
-Pero me parece que lo que necesitás es mi cadáver y no el mosaico, loco.
-Loco era Esteban. Yo soy un pobre Hijo de Satanás.
Y durante una peinada-tic que le hace culebrear guillotinescamente la sombra empalmo el formón pero después lo suelto:
-Y sos un gran actor, además. Tanto hablar del maestro.
-¿Por qué dijiste que en el futuro se habla mucho de Judas?
-Porque todos te llevamos adentro. Yo recién pude echarte hoy a la sexta en la letrina, por ejemplo. Mientras vos inventabas el cuento del sótano y mandabas a los levitas a la casa de tu amada víctima.
-Sara ya se había vuelto otra novia del buen pastor de putas. La perdí.
-También perdiste al uruguayo borracho, aunque me enloqueciste como quería mi madre y casi termino zambulléndome del todo en la Gehena. Y el haberle vendido la talita a Publio fue muy inteligente. Porque solamente se lo podía contar a otro borracho creyente y así yo iba a salir a buscarte como un corderito.
-Sabía que ibas a terminar viniéndome a buscar aquí.
-Pero yo vine aquí porque Nuestra Señora me pidió que le llevara el mosaico.
-¿Quién?
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