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primera edición 2007: Caracol al Galope / elMontevideano Laboratorio de Artes
VIGESIMOCTAVA ENTREGA
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Isabelino Pena estornudó dieciséis veces y el brazo que sostenía la copa le pegó un sacudón tan pendular que terminó salpicando a la rata-perro:
-Me hiciste acordar al Predicador. Y el Eclesiastés me enferma más que una tormenta de polvo.
-Jesús tendría que haberle prestado otra atención al Eclesiastés. Siempre me di cuenta que no lo soportaba.
-Es que el Predicador era casi tan podrido como el Pastor de Saramago.
-Ese no sé quién es.
-Un profeta enfermo del año 2000 que le pidió a la humanidad que perdonara a Jesús porque no supo lo que había hecho.
-¿Vas a empezar otra vez con los miles de años?
Y la caspa le tiembla conmovedoramente y me doy cuenta que él también cree en mi viaje:
-Dos mil años no son nada, Esteban. La maldita comedia sigue siendo la misma que la de ustedes: media humanidad finge creer que no cree porque no puede soportar que la verdad de Cristo sea la verdad.
-Judas decía que los Hijos de Satanás viven muertos de miedo.
-Eso nos pasa a todos. Pero la pura fe siempre mata al puro miedo. ¿Sabés lo que se merecen ustedes? Que Jesús se les aparezca y los perdone.
-Ahí sé que me mataría.
ALMÁ 14: El jueves se empezaba comer el pan sin levadura y se sacrificaban los corderos y amaneciste sola en la cabaña-taller y los discípulos le preguntaron a Jesús dónde quería que fueran a prepararle el banquete de Pascua y el maestro llamó aparte a Pedro y a Juan y los mandó a Siloé y los seguiste montada en Nazareno y apenas cruzaron el puente de los Olivos se cruzaron con Judas que venía de tu casa oliendo a Gehena y cuando quiso averiguar adónde iban los otros dos dijeron que a buscar agua: en la fuente encontraron a Juan Marcos con un cántaro y lo siguieron hasta la mansión del padre y el muchacho pelirrojo te invitó a entrar con ellos y el patio olía a pan fresco y jazmines y granadas y enseguida encontraste a María de Nazaret que te abrigó con su respiración y les sirvió leche de cabra y volvió a decir que el lobo tenía una paz de espada y de golpe sentiste que lo iban a matar igual que a Jesús aunque no pudieras adivinar ni cuándo ni por qué: y después subieron todos al piso donde se iba a celebrar la cena y al lado de los divanes que rodeaban la mesa en forma de U ya se habían colocados los lavapiés y Juan Marcos le explicó a sus padres que el maestro no quería que hubiese sirvientes y mientras volvían a Siloé el muchacho de ojos violetas les explicó en secreto a Pedro y a Juan que Judas no podía enterarse de cuál era el lugar elegido para el convite y al volver a tu casa tu madre hipaba el Hallel y te preguntó llorando si pensabas que tenía la sangre sucia y dijiste Rufo te quiere más que a los cedros del Líbano y ella empezó a oler a luna y te desnudó para ungirte con nardo y después le lavó las patas a Nazareno y dijo Pobrecito.
Isabelino Pena le pidió a Esteban que le contara la vida de Judas y terminó sentimentalizándose:
-Pero no hay olvido, ni sueño: / carne viva. Asi que a papá Iscariote le gustaba hacer pozos con huesitos de perdiz.
-Pero fue como si le hubiese agujereado el corazón a Judas.
-Muy poético, maestro.
-Me estoy cagando arriba. Y no me digas maestro.
El Valiente va a la letrina y retengo un buche maratónico antes de gardelearle a la rata-carpincho:
-Vos rodaste por tu culpa y no fue inocentemente / berretines de bacana que tenías en la mente.
El asesor de Judas y aspirante a consejero del Mesías terrenal había dejado abierta la sheol y el detective escuchó al gallo de la tercera vigilia y se chupó los nudillos aliviado por el vino espesísimo. Capaz que el cagoneta se escapó o está juntando huevos para matarme.
-¿Y si jugamos a conmemorar a Jesús? -bajó con la cabeza empapada y dos tortones el hombre decidido a mostrar la calva delantera. -¿Jugar a creer también es fingir, español?
-Jugar a creer es pecar contra el Espíritu Santo -me acuerdo de un montón de sabios uruguayos que nunca aprendieron nada. -El peor de los escándalos.
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