26 de abril de 1937.
A mis 56 años de edad nunca había visto una masacre como esta. Nunca
había sentido tanto dolor en mí. Me cuesta trabajo entender los desastres de la
guerra. El sinsentido. Si hay algo en esta vida que no soporto, es la muerte de
gente inocente. El dolor de las familias cuando lo pierden todo. La fragilidad
de la vida. Fragilidad que se exacerba por las armas. Por ambición. Por poder.
La vida se vuelve frágil, en un momento todo se puede acabar. Hoy la ciudad de
Guernica ha sido bombardeada. Llevamos desde julio del año pasado en guerra: la
Guerra Civil Española, a mando de Francisco Franco, comandante militar español
conservador. Parece que ahora, el resto del mundo también está en desacuerdo
con nuestra política, pues han sido los mismos alemanes, los nazis, quienes a
bordo de aviones de guerra, se han encargado de matar la vida de esta ciudad
vasca. Nos han bombardeado. Hablo en plural porque siento el dolor como si una
de las bombas me hubiera caído a mí encima.
1 de Mayo de 1937.
Me acaban de llegar imágenes de Guernica. A pesar de que soy español, ahora estoy viviendo en Francia, por lo que la prensa tardó en llegar. Estoy devastado, no puedo verlas y no sentirme impotente. El dolor que siento en el pecho es tan grande que no me cabe. Hace algunos días me avisaron que los republicanos esperaban ansiosos una obra mía que representase a España. Cual propaganda, buscaban que patrocinase a mi país, con motivo de la celebración de este año de la Exposición Universal en París. Hasta hoy no tenía idea de cuál sería mi tema, ni un boceto tenía. El tema ha llegado. Yo no lo he escogido: él me ha escogido a mí. Este evento no puede pasar desapercibidio. Lo tiene que conocer todo el mundo, y que nunca quede en el olvido. Que este genocidio, este atentado a los inocentes, no deje a nadie indiferente. Por fin hoy me he inspirado.
La Guerra Civil Española duró casi tres
años. Fue durante el transcurso de esta, casi un año después del
levantamiento de Franco (específicamente el 26 de abril de 1937) que
ocurrió un evento que conmocionaría a España y en especial a un artista
español: Pablo Picasso (1881-1973). El pueblo de Guernica era una villa de
no más de 10000 habitantes, situada en el País Vasco. Esta región, al igual que
Cataluña, era una parte muy republicana. Hitler estaba aliado a Franco, por lo
que decidió ayudarlo mandando a la Legión Cóndor (fuerza aérea nazi) para
ayudar en las cuestiones de guerra. La fuerza aérea nazi bombardeó el pueblo
hasta acabar con él. “Guernica fue bombardeada y destruida. Mil bombas
sobre 6 aldeas. Guernica presa de esas llamas”. Ver fotos de la ciudad
destrozada de Guernica, impulsó a Picasso a dar a conocer al mundo la barbarie
ocurrida. Pese a que fueron días de prueba y error, boceto tras boceto,
finalmente Picasso haría una de las obras más famosas de la historia del arte:
El Guernica.
Guernica es una obra de gran valor histórico, social y político; una obra que
marca la historia de España y la historia de las guerras. Al ser realizada a la
vez por un artista español, tiene un fuerte carácter nacionalista. El
famoso cuadro nació como producto de la reacción que el artista
experimentó ante la noticia del atentado al pueblo vasco.
A simple vista, en la obra no vemos más que lo aparente: las figuras que lo
conforman. Se puede identificar a un toro, un caballo, una mujer con un niño en
brazos, una cabeza degollada, una extremidad (brazo) en el suelo, una paloma,
una lámpara, y otras dos mujeres. En general se perciben gestos de dolor,
de angustia. Es un cuadro que tiene un efecto propagandístico; es la
escenificación de un drama. Fue la manera de Picasso para responder a la Guerra
Civil. Inclusive los colores nos podrían hablar de una especie de luto por parte
del artista. La luz intrínseca en la obra, con la lámpara situada encima del
caballo, es una luz que no alumbra: predomina lo tenue en el cuadro. Esta luz
que sólo alumbra un poco, simboliza la esperanza del pueblo español.
"La antorcha y la lámpara encendida simbolizan la aparición de la Verdad
en el lugar del horror. La pintura desenmascara ante los ojos del mundo las
mentiras del fascismo".
Las caras agonizantes, en el que sería
un cuarto tan pequeño y con elementos que van desde llantos, lágrimas a
guerreros muertos, hacen que al observarla se sienta la impotencia, el dolor:
lo que cualquier guerra implica.
Además de remitirnos al cubismo tardío, en el Guernica sin duda apreciamos el expresionismo, pues los rostros de los personajes nos transmiten agonía y dolor, sentimiento predominante en tiempos de guerra. El realismo sigue estando presente, aunque no está muy claro, pero sí podemos diferenciar al caballo del toro, como a las mujeres. Cada elemento de la obra, cada animal, persona u objeto tienen un significado. De estos mismos, los elementos clave de la obra podrían ser el toro y el caballo.
"Un toro contempla desde un
extremo, como sorprendido o acaso dispuesto a embestir, la destrucción
–radical, sin fronteras– que reina frente a él, mientras, en el centro, un
caballo relincha de dolor, mostrando los dientes, no se sabe si de rabia o de
pena. Por el suelo, figuras humanas en patéticas posturas, desgarradas por el
sufrimiento y el terror. Al otro lado del toro, una cabeza masculina parece
gozarse con el dantesco espectáculo".
Estos dos elementos han sido víctimas de confusión, incluso por el mismo artista, ya que en una ocasión a la pregunta del significado de estos dos integrantes contestó: “El toro es un toro y el caballo es un caballo. Son animales sacrificados. ¡Y eso es todo, en lo que a mí respecta!, Qué el público vea lo que quiera ver”.
Estos dos elementos han sido víctimas de confusión, incluso por el mismo artista, ya que en una ocasión a la pregunta del significado de estos dos integrantes contestó: “El toro es un toro y el caballo es un caballo. Son animales sacrificados. ¡Y eso es todo, en lo que a mí respecta!, Qué el público vea lo que quiera ver”.
Sin embargo, en otro momento, ante la pregunta de si el caballo representaba al
franquismo, respondió que “había que ser ciego, tonto o crítico para no verlo”.
Que en la obra se hayan incluido animales, puede hacernos recordar a nuestros
instintos, a la manera de los hombres de ser impulsivos y a veces cometer actos
irracionales. En este caso es un acto irracional pues el ataque al pueblo de
Guernica sigue sin tener razón aparente. Se cree que fue un matar por matar. La
paloma, que es símbolo de paz, está herida: tiene un ala rota.
El pasado es la base del presente, son
los cimientos de lo que hoy somos y la historia es el recuerdo de lo que fue,
de lo que ha pasado, de lo que la humanidad ha vivido. Gracias al arte, y en
particular al Guernica, es que podemos recordar muchos momentos históricos,
encontrar validez a eventos ocurridos y estudiar tiempo, espacio, así como
resolver nuestras dudas. A que aprendamos del pasado para no volver a repetir
los mismos errores, y por lo contrario también aprender de los triunfos. A
saber de dónde venimos y a dónde vamos. El arte, con su carácter
propagandístico, como método de llegar al público, ha sido efectivo desde
siempre.
Referencias:
-Battistini, Matilde. Picasso.Barcelona:
Editorial Electa, 2008
-Costa Clavell, Xavier.
Picasso: Museo Picasso de Barcelona. Barcelona : Escudo de Oro, 1982
(24-12-2014)
(24-12-2014)
No hay comentarios:
Publicar un comentario