martes

EL EVANGELIO SEGÚN EL TRAIDOR (LA MALDITA COMEDIA) - HUGO GIOVANETTI VIOLA


primera edición WEB
primera edición 2007: Caracol al Galope / elMontevideano Laboratorio de Artes

VIGESIMOQUINTA ENTREGA


25


Isabelino Pena se hincó frente a la gigantesca roca de la tumba corrida exactamente para que pasara un hombre y murmuró:
-Anunciamos tu muerte proclamamos tu resurrección ven señor Jesús.
Y recién entonces me doy cuenta que Almá está sentada a lo Buda sobre el bloque basáltico y me froto la miopía encandilada:
-Tú, hermanita, novia mía / eres jardín cerrado, / cerrada fuente, / sellado manantial; / jardín donde brotan los granados / de frutos exquisitos; / jardín donde hay flores de alheña, / nardos y azafrán, / caña aromática y canela, / y toda clase de árboles de incienso, / de mirra y de áloe; / ¡todas las mejores especies aromáticas! / La fuente del jardín / es un pozo del cual brota / el agua que baja desde el Líbano. / Viento del norte, ¡despierta! Viento del sur, ¡ven acá! / ¡Soplen en mi jardín y esparzan su perfume! La paz contigo, Ojos de Plata.
-Ven, amado mío, a tu jardín, / y come de sus frutos exquisitos -sonrió la chiquilina de ojazos y perfil y cráneo fluorescentes. -¿Tienen tan poca fe que pensaron que no iba a saber defenderme?
-Se adora como se puede. Pero tenés que irte a Betania con Rufo, ya mismo. ¿Se te apareció el Señor?
-El Señor sabe que yo puedo verlo desde que lo toqué. ¿No me bajás a caballito, hermano?
-Cuidado con los pozos -me taladra Nazareno.

SARA 13: Y el martes Jesús desenvainó definitivamente la espada de la discordia y el Iscariote y el Valiente te visitaron como si tu casa fuera una taberna privada y atendida sin costo por la adúltera y se pelearon casi hasta rajarse las túnicas y ahora los dos se raspaban los dientes con un sicar y aquella noche hablaste: a Esteban lo habían asqueado la maldición de la higuera y la mansedumbre astuta de recomendar que se le pagara al César como paloma y no como serpiente pero lo que lo enloquecía era la parábola de las vírgenes y la profecía de la vuelta del Señor con sus cohortes de querubines arpistas y la falta de fe en la eternidad de las murallas resurrectas para defender el oro de la alianza y en el siglo del cambio profetizado durante el glorioso exilio de un pueblo destinado a partir al imperio con el mismísimo filo de fuego que le separó el oleaje de los juncos sangrientos a Moisés y de golpe te escuchaste gritar Lo que te falta es juntarte con los fariseos en el atrio y Esteban argumentó que él también los odiaba aunque con muchos de ellos se podía negociar y tuviste que conceder Lo que asusta del maestro es que cree que por ser el Mesías Dios no va a abandonarlo y el Valiente brindó por tu inteligencia indigna de la sumisión ovina del mujerío y enderezó el sicar hacia la desesperación de Judas sonriendo A veces pienso que el Rabí está esperando que creamos de verdad que es el Hijo y lo forcemos a que nos demuestre a todos la señal del triunfo: y Judas se ovilló aplastándose el rulerío feminoide y cuando volvió a llenar el copón contestó Lo peor es que el elegido para ayudar al maestro a triunfar tenga que ser un hijo de Satanás.

Isabelino Pena le regaló los collares a Almá y le pidió que lo esperara en Betania y después que los perdió de vista se arrancó el pollerón y se ató el manto púrpura sobre el taparrabos. Ahora parezco un troglodita maquillado y perfumado en Magdala pero me importa un pito, y vuelvo a la Calavera desandando la cortada que trilló Nazareno entre las quintas y el rocaje mezclado con los sepulcros.
-Timbas del aire los cuervos / le hicieron el funeral -cantó zitarroseñamente el detective mientras veía emerger los tres cactus sin brazos recortados en la pesadez color malvón del desierto de Emaús.
Entonces me barbarizo al estilo davídico y espanto a cascotazos a los pajarracos que ya están destripando a la supuesta llorona y cuando le doy vuelta la cabeza barbuda y degollada encuentro la crucecita pirograbada en la frente:
-Ahora sí que te rompieron, Papá Montero -enderezó con el pie Isabelino Pena la tablilla donde acababan de escribir en arameo y con sangre BARRABÁS REY DE LOS JUDÍOS.
-Vas a tener que encontrar otro jefe para asesorar, Esteban -me persigno frente al madero y siento que resolví dos casos al hilo en la capital del infierno.
-Pero todavía tenemos que hacer el gol de Ghiggia -volvió a mirar los stipes el ddtective al llegar a la Puerta de Efraim.

-Claro que un vinito para festejar el empate no vendría nada mal -se transforma en mi madre el amontonamiento de trapos y de tripas. 

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