FEDERICO “DINAMITA” PEREDA

“NECESITAMOS UNA AGENDA CULTURAL QUE TOME A LA CIUDAD COMO LA CAPITAL CULTURAL QUE ES”

El músico uruguayo es la entrevista salvaje de febrero. En 2018, cumple 20 años sobre los escenarios. La guitarra siempre encendida y el sueño de tocar rock y blues a un gran volumen hecho realidad. Fito Páez, Charly Garcia, Juanse, David Lebón, Ruben Rada, Lobo Núnez, Mick Jagger, sus amigos Pity Álvarez y Zorrito Von Quintiero, son algunos de los grandes nombres con los que ha tocado en los últimos años. Luego del exitoso ciclo de verano Rockeo y Julieta, donde fue parte de una super banda rioplatense, y con varios temas sonando en las FM´s, se plantea un nuevo año junto a su banda, la Swing Factory. Admirador absoluto de Pappo, dispara: “El idioma de la música no precisa recomendación ni fama ni nombre, solo colgarse y tocar”.

¿Cuántos años tocando la guitarra?

Fue en el año 1998, que me subí por primera vez a un escenario. Hace 20 años.

Qué momentos recordás como muy importantes en tu carrera, esas señales que te marcaron el camino.

Lo que marca una diferencia es seguir una línea, ser fiel a lo que uno quiere hacer. Con el tiempo he demostrado eso: lo que quería hacer lo pude llevar a cabo de buena manera y por mis propios medios. Tener ganas de tocar, tocar bien, ser respetuoso de la música y de la gente, a los músicos que tenés al lado. Rendir. Hay que siempre dar el máximo, porque la gente lo percibe, sabe si estás haciendo las cosas a medias o si estás comprometido al máximo con lo que estás haciendo.

¿O sea que la constancia es lo importante?

Me parece que los momentos que definen todo, es estar para la música, que no sea simplemente un accesorio, eso ha definido mi vida en general. Por eso se ha dado estar junto a esas personas que mencionás. Esto no es una actividad de fin de semana, estamos metidos y hemos llegado a compartir escenario con muchos ídolos, y es un premio. Lo único que rescato es que hay que estar para tocar, el idioma de la música no precisa recomendación ni fama ni nombre, solo colgarse y tocar. Si se toca bien se puede estar y sino tenés que ir para tu casa…

¿Cómo se armó el ciclo Rockeo y Julieta en Medio y Medio?

El Zorro es una máquina de inventar nombres y durante meses rondó la idea de Rockeo y Julieta, hasta que cerró el ciclo con Leandro de Medio y Medio. El verano pasado habíamos hecho una fecha exclusiva de rock muy buena y ahora Zorrito quería abrir la cancha a otros estilos.

¿Cómo les fue con la gente y las canciones?

Planteamos un show un poco más descontracturado, la idea del Zorrito fue armar un show más teatral o por así decirlo un café concert, con un poco de humor, poesía, rock, soul, bossa nova. Como Francisco Fattoruso tenía los martes la temporada pasada, pero se fue a vivir a California, cerramos este ciclo que por suerte fue un éxito, sold out todos los martes. Fueron 5 martes en Portezuelo y uno más de despedida en Inmigrantes (ex Paullier y Guaná) en Montevideo, con el sótano a full.

Hubo varios invitados estelares…

En la primera fecha vino David Lebon, compañero de Charly Garcia en Serú Girán y de Pappo en Pappo´s Blues y de Spinetta en Pescado Rabioso. También estuvo Ruben Rada, por lo que tuvimos el apoyo de artistas ilustres, antes que se diera la presencia de Charly…

Contanos acerca de la llegada de Charly, luego de 8 años tocó en vivo de nuevo en Uruguay…

En realidad, hacía un tiempo que sabíamos de la posibilidad de que Charly viniera para el 23 de enero, a celebrar el cumpleaños del Zorro. Se venía manejando, pero un estado de salud delicado complicaba un poco las cosas. En un momento estuvo en duda su llegada, porque perdió un vuelo, pero finalmente llegó. Nosotros ensayamos un repertorio de él especial para esa noche. Yo había tenido la oportunidad de tocar con él hace 10 años en Buenos Aires, cuando formaba parte de Limousine. Para mí es un honor tocar con Charly.

¿Cuál fue el concepto del show?

Este show de Medio y Medio, más que un show de Charly, era una especie de homenaje: devolverle a él todo lo que nos dio a nosotros los músicos y a la gente. No está en óptimas condiciones para tocar, por sus problemas de salud, así que era devolverle la alegría que nos da y que se sintiera cómodo en un escenario íntimo. En el último año no había estado tocando en vivo, sacó un disco, pero tocó una o dos veces en vivo nada más. Que las canciones vivan, para nosotros tocar con él fue un honor. Charly nunca había tocado con esta banda, fue un show para disfrutar y homenajearlo en vida, muy espontáneo.

Salvaje estuvo presente en la noche de Charly, y capturó uno de los momentos más emotivos con el clásico Rezo por vos. ¿Cómo se sintió, hablaste algo con él?

Él estaba emocionado de estar con amigos y con gente, tocando en un buen piano Yamaha, con su chaqueta de cuero y su remera de los Who, hablando de rocknroll en el camarín con Rada. Me contó que vio en vivo a Los Shakers en Argentina a mitad de los sesentas. También que Elton John fue una gran influencia para él a la hora de tocar el piano, es un gran pianista de rocknroll, a pesar de ser conocido por sus canciones más pop. Lo pueden ver en la película de Mark Bolan, Born to boogie, junto a Ringo Star. Hablamos también de David Crosby, integrante de los Byrds, otra influencia que Charly plasmó en su obra con el tema Me siento mucho más fuerte (I feel a whole lot better). Lo vi bien, con ganas de estar.

Se te vio recientemente en las redes sociales junto a Pity Álvarez en Buenos Aires…

Pity es un salvaje pero para bien, una persona que decide vivir a full, sin resguardo alguno, lo cual me parece que es una gran actitud porque disfruta cada momento de la vida a tope. Una persona con un gran corazón y una gran inteligencia. Creo que ese personaje que la gente tiene presente de él, no es la persona, es el artista, no es la persona de Cristian Álvarez: tranquilo, tocando la guitarra en una mesa y charlando. Nos hicimos amigos, pudimos tocar hace un par de años con él en Montevideo Music Box.

¿Seguías a Viejas Locas? ¿Qué planes tienen?

Yo soy un rolinga de la primera ola, siempre fan de Viejas Locas cuando era guacho y tocaba canciones de VL con mis primeras bandas, así que poder tocar con él esas canciones fue un disfrute máximo. Estamos en contacto, tengo ganas de invitarlo a cantar una canción y colaborar artísticamente, aún no se ha hecho nada, pero se que las ganas están. Espero volver a tenerlo por acá en Uruguay, se que hay mucha gente que lo sigue y lo quiere ver en vivo, esperemos que pase pronto.

Este verano salió un sencillo nuevo de la Swing Factory (click para escuchar en Spotify), “a la vieja usanza”, porque es en vinilo y con una canción por lado, ¿cómo presentarías este material?

Es la primera vez que la banda logra editar un formato de vinilo en 7 pulgadas, lado A y lado B. Estamos muy contentos. Trabajamos mucho en la grabación del disco el año pasado y logramos terminar dos canciones, Escondiendo el sol y Rocknroll pa todo el mundo.

¿Qué podés decir de las nuevas canciones?

Escondiendo el Sol es un tema bien radial, un folk-country-rock. Es una canción que trabajamos mucho con la base musical, el estribillo no terminaba de cerrar y no sabíamos cómo darle el martillazo final. En eso apareció Jorge Nasser, copado, y nos ayudó con la letra y la melodía, cerrando la canción que ahora está sonando en la radio FM. Hasta el momento es lo mejor que ha hecho la banda en composición y sonido.

¿Cómo fue la experiencia de trabajar junto a él?

Nasser es un groso, referente del rock nacional con Níquel durante años y una persona que conoce muy bien el arte y oficio de la composición y forma de las canciones. Aportó su sabiduría y su onda. Quedamos muy conformes con el resultado y la canción está gustando mucho…

¿El lado B?

El lado B, es un rocknroll derecho, una declaración de principios, un rock liso, diría el padre de un amigo, que quedó sonando muy bien. Grabamos todo en casa con el ingeniero de sonido Juan Branaa. Una semana de bases, otra de overdubs, y luego la etapa de mezcla y voces con Javier Cardellino, que tiene un estudio espectacular en su casa. Todo hecho en el barrio de Cordón. Luego se masterizó en Sterling Sound, NYC.

¿Qué proyectos para el comienzo del año?

Apuntamos a una presentación oficial del disco, mientras estamos difundiendo y vendiendo este simple, que siga sonando en la radio y presentar el nuevo material a mediados de año. Ir a tocar a Buenos Aires, donde nos presentamos en diciembre pasado en el Club Lucille, la idea es volver.

Si tuvieras que nombrar un guitarrista de rock y blues de Uruguay y uno de Argentina

En su momento fui muy influenciado por Guzmán Mendaro, cuando empezaba a tocar: es un gran guitarrista, aparte de que es un amigo. Es un gran referente de nuestra generación, creo que es el que mejor hizo esa parte del hard rock y blues. Si me tuviera que ir más atrás en el tiempo, eligiría a Daniel Bertolone en su época de Días de Blues. Lo que tocaba Bertolone en esos años fue inigualable para Uruguay y para el mundo, porque estaba a nivel mundial.

¿Y en Argentina?

En Argentina Pappo, intocable rocknroll y blues. Pero han sido muchos que me han marcado. Pensando en un guitarrista más actual, Gabriel Carámbula fue una gran influencia en su momento, como guitarrista. Lo de Pappo es una carrera intocable, años y años dedicado a la misma causa, la del rock y el blues y bueno, por algo terminó tocando con B.B. King en el Madison Square Garden, pelando a la par de Buddy Guy…

El solo más largo que hayas hecho…

Tengo la costumbre de tocar mucho en mi casa, solos largos, aunque no tanto en vivo…Hace unos días, cuando nos juntamos con el Pity en Buenos Aires, mientras él charlaba con amigos en el balcón, me quedé tocando solo y después vino y me dijo: “Es el segundo solo más largo que escuché en mi vida”. No me dijo cuál fue el primero, pero estoy en el segundo lugar, jajajaj.

Un artista actual que te guste escuchar.

Brittany Howard, de los Alabama Shakes, una cantante americana muy grosa, que además es una guitarrista con una banda y sonido espectacular: la mezcla ideal de soul, rnb, rock, con bases o intenciones raperas en el beat. Me parece de lo mejor que ha salido en los últimos tiempos. Me hace acordar a Sister Rosseta Thorpe, una de las inventoras del Rnr, que tocaba con Gibson Les Paul, a fines de los cuarenta, principios de los cincuenta…

Si pudieras cambiar algo de Uruguay, ¿qué sería?

Estamos pasando por una etapa de cambios, hay un despertar grande en muchos aspectos y eso también genera la duda de si estamos prontos para asumir tantas cosas. Hay un problema en la seguridad primero, estamos sufriendo mucho en este nivel, siento que no estamos cuidados, y la gente está pasando mal con algo que debería estar más controlado.

¿Y en el aspecto artístico?

Por otro lado, me gustaría que a nivel de la cultura, la gente apreciara más masivamente la cantidad de música y arte que hay en Uruguay. Más allá del Cranaval, las Llamadas, la cumbia cheta o la cumbia tradicional. Hay otras expresiones, otra forma del arte, que no están valoradas ahora. Quizá en el tiempo se logre.

¿Cómo ves el panorama actual de Montevideo?

Hay un montón de cantautores de diferentes estilos, ya sea tango, otro rock, o el candombe cancionero. Hay un renacimiento en el hip hop, las nuevas generaciones están colgadas con el género y hay muchos colegas en gran nivel. En Montevideo están pasando muchas cosas a nivel cultural. A veces es difícil que eso llegue y salga de los espacios reducidos. Necesitamos una agenda cultural que tome a la ciudad como la capital cultural que es. Esto nos abriría más lugares a los músicos, que luchamos contra las denuncias de los vecinos, las habilitaciones. Las autoridades deberían subsidiar esta industria, en vez de darle con un palo en la cabeza, como muchas veces pasa.

(SALVAJE / 21-2-2018)